Después de una noche tranquila, son las siete y media ,como de costumbre salimos los últimos del albergue. No está abierto el bar, pero una máquina de café-te-cacao que hay en la entrada y unas madalenas compradas el día de antes nos sirve para no salir con el estómago vacío. Un corto tramo de descenso y el camino comienza a empinarse de forma muy suave, adelantamos a los peregrinos con los que compartimos el albergue la noche anterior antes de llegar a Estella.
Entramos en la ciudad pegados al río Ega, a la izquierda la impresionante iglesia del Santo Sepulcro, consta que en 1123 ya era sede de esta cofradía. Según wikipedia, la portada gótica del siglo XIV: Consta de doce arquivoltas abocinadas que descansan en columnillas rematadas en capitel corrido decorado con motivos vegetales y zoomórficos. El tímpano de la portada se divide en tres niveles. En el inferior se representa «La Última Cena», en la superior «La crucifixión», mientras que el central presenta tres escenas: a la izquierda «Las tres Marías junto al sepulcro», en la central «El rescate de los inocentes» y a la derecha el «Noli me tangere».
Como para estarse toda la mañana contemplando la historia. La última vez que pasé una ikurriña tapaba la vista, y salí de Estella-Lizarra sin pararme a mirar, a toda velocidad. Un paseo tranquilo por la corte de Carlos VII, y el camino nos conduce al monasterio de Irache.
Parada obligada junto a la fuente del vino, está seca y no podemos brindar como reza en cartel, pero si podemos hacerno una foto. El monasterio está justo al lado de las bodegas, otra parada obligada para admirar la bella arquitectura de este monasterio, remanso de paz roto por los autobuses del INSERSO y sus ocupantes que lo acaparan todo. Aún así puedo tener un momento de recogimiento en la capilla, para después continuar camino.
El terreno va cambiando a medida que nos alejamos de los Pirineos, atrás quedan las primeras etapas pirenaicas con sus duras subidas. Pasado Irache pedaleamos por senderos entre robles y encinas, el camino está entretenido, y se acerca la hora de comer que el desayuno ya está gastado. Llegasmos a Los Arcos, preciosa villa típica Navarra.
Parada obligada para reponer fuerzas, pasamos por los pueblos andando, pausadamente y con calma, para no perder detalle de su arquitectura, casas señoriales, tiendas y mercados. Es pronto para parar a comer, continuamos hasta Torres del Río. Realmente son dos pueblos separados por el río Linares, Sansol y Torres del Río. El primero, aparte de la iglesia, no tiene donde parar, el segundo tiene albergue y un restaurante nada más entrar en el pueblo muy bien señalizado con las típicas flechas amarillas del camino. A la entrada del restaurante un montón de bicis apoyadas en la pared nos anima a pasar; atamos nuestras monturas y entramos en el restaurante. Un grupo de ciclistas está terminando de comer, uno de ellos tiene un aparatoso vendaje en el brazo, nos los encontraremos más adelante por el camino. Un menú del peregrino, abundante y bien servido, después de comer “hacemos la siesta” necesaria después de la opípara comida, además no debemos pedalear bajo un sol de justicia.
El trayecto que nos resta hasta Viana es muy sencillo, prácticamente todo bajada. Entramos en la ciudad por su zona nueva, un moderno polideportivo con piscinas, ya sabemos que hacer esta tarde. Subimos al casco histórico, un paseo por sus calles centrales buscando el albergue de peregrinos; en la Plaza de los Fueros, junto a la Iglesia de Santa María está el albergue parroquial… lleno, mala señal. Preguntamos a una agente municipal sobre la existencia de otros albergues de peregrinos, al final de la calle, junto a las ruinas de la Iglesia de San Pedro está el albergue municipal. Allí encontramos acomodo por 5€ la noche, dejamos las alforjas y equipajes a buen recaudo, y con las bicis nos vamos a la piscina para relajar músculos.
La etapa de hoy la damos por finalizada, la tarde la pasamos en el parque acuático que hay a la entrada de Viana, tirados en la pradera, y descansado. La etapa de hoy fue un poco de recuperación después de las duras etapas de pirenaicas, mañana abandonaremos la comunidad Navarra para entrar en La Rioja.
Escrito por villaviciosabtt 
Villaviciosa BTT 